En los pasados 7 y 8 de Junio, los alumnos/as de 1º y 2º de ESO del colegio, se desplazaron hasta Rota y San Fernando, acompañados por sus profesores , para visitar las instalaciones militares de la base de rota y el tercio de la Armada de San Fernando.
Los alumnos, somnolientos, pero emocionados por el viaje, salieron desde la puerta del centro a las 04.30 de la madrugada del día 7, y tras las paradas obligatorias para reponer fuerzas y cumplir con la normativa de viajes para alumnos, llegamos a la base naval de Rota en torno a las 10:25 horas. En la puerta, nos esperaba el oficial Pablo Doudero, contacto en la base del comandante Ignacio Medina (al que agradecemos todo su esfuerzo y dedicación) gracias al cual hemos recibido durante estos dos días un trato exquisito. A cada uno de los grupos que hicimos, nos presentó a dos oficiales que iban a acompañarnos por todo el recorrido por la base como apoyo e información, así como para cualquier problema que pudiese suceder. Un primer grupo se dirigió hacia la parte del FLOAN, donde se encuentran los hangares y aeropuerto, donde vimos helicópteros, aviones de transporte, aeronaves varias y los famosos “Harriet” americanos; además, de que en cada uno de ellos, siempre había esperándonos un marinero, oficial o soldado para explicarnos el funcionamiento, uso y misiones en las que habían participado, y por supuesto, nos dejaron subir a un helicóptero, nos hicimos montones de fotos y los chicos/as preguntaron todo lo que se les pasaba por la cabeza…la verdad, fue realmente interesante. Luego, cambiamos con el otro grupo, que estuvieron visitando el LHD Juan Carlos I, el buque militar más grande de la historia de la armada española) (http://www.armada.mde.es/ArmadaPortal/page/Portal/ArmadaEspannola/buques_superficie/02_lhd-juan-carlos-i–03_lhd-juan-carlos-i-l-61, y en el que los chicos/as pudieron disfrutar de un vídeo de presentación, para pasar a visitar el buque en su totalidad, desde las bodegas de carga hasta la torre de control, pasando por sus 14 plantas. Subimos y bajamos pasamanos, nos desplazamos de un lado a otro, vimos la pista de lanzamiento de aeronaves, torre de control, camarotes de tropa etc…en fin, toda una experiencia.
Tras esta parte de una agotadora jornada, nos desplazamos hasta la parte americana de la base para comer en el Pizza Villa, donde pudimos degustar, acompañados por los oficiales al cargo de unas deliciosas pizzas al más puro estilo americano y un agradable rato de convivencia. Justo al terminar, nos acercamos dando un paseo a la heladería Baskin Robbins, para que el que quisiese, tomase un helado. Lo curioso aquí es que muchos de los chicos al pagar, se extrañaron de que les devolviesen la vuelta en dólares (es lo que tiene una base hispano-norteamericana); así que después de esto, nos dispusimos a salir para el Tercio de la Armada de San Fernando, hasta donde amablemente nos acompañó el brigada en su propio vehículo oficial. Al llegar al TE.AR. de San Fernando, donde finalizaba su tarea, D. Tomás le hizo entrega de un obsequio por parte del Centro.
Una vez allí, los oficiales al cargo de nuestro grupo se presentaron y nos llevaron hasta uno de los patios de armas, donde hicimos grupos de chicos y chicas para su alojamiento. En primer lugar instalamos al grupo de chicos, y a continuación en otro ala, a las chicas, que tuvieron tiempo para descansar un rato y disponerse para seguir con la programación. Mientras, los profesores pudimos charlar un rato con los oficiales que iban a estar con nosotros esa tarde, y sobre todo, al día siguiente. No eran las 18:30 cuando los chicos y chicas ya estaban dispuestos para salir, y es que la mayoría estaban deseosos de llegar al centro comercial Bahía Sur, así que nos desplazamos en grupo, y una vez allí, le dimos tiempo libre para que diesen una vuelta hasta la hora de la cena. A las 20:30 aproximadamente, teníamos reunidos a todos los chicos en el McDonald’s…otra odisea, y es que poner a 95 alumnos a pedir menús es precisamente eso, aunque los que más se divirtieron aquí fueron los miembros del personal del restaurante, que se lo tomaron al más puro estilo prueba de concurso, y siendo sinceros, fueron bastante rápidos y simpáticos, teniendo en cuenta la que se la había venido encima.
Al finalizar, volvimos al alojamiento del TE.AR. y después de un rato en la alameda que hay enfrente para que los chicos tuviesen un rato de charla y/o juego, nos dispusimos a entrar en las habitaciones para un merecido descanso, después del madrugón y la cantidad de actividades del día…los chicos fueron bastante más diligentes y durmieron antes, aunque las chicas fueron algo más revoltosas y durmieron algo más tarde.
Al día siguiente, a las 8:00 se tocó diana, y los chicos y chicas se despertaron, no sin problemas, y al salir, ya teníamos allí a los oficiales dispuestos a llevarnos al desayuno en el club de tropa del Tercio, allí todo el mundo pudo reponer fuerzas para el intenso día que nos esperaba. Nos desplazamos al museo naval, donde pudimos ver anclas de época fenicia y romana, numerosas muestras de armamento de batallas antiguas (como Trafalgar), el antiguo mascarón de proa del navío Juan Sebastián Elcano, entre otra cosas, para pasar luego al Panteón de Marineros Ilustres, donde el increíble guía –Sergio-, nos hizo de esta visita uno de los mejores momentos de la excursión por su manera de contar las cosas, intercalando bromas, chistes, anécdotas y numerosos datos curiosos que llamó la atención de todos los que íbamos. Finalmente, y después de unas fotos de recuerdo, volvimos al TE.AR., al salón de actos donde con un vídeo, explicaron lo qué es la vida en la marina y cómo se accede, para finalmente visitar diferentes equipos y vehículos del Tercio, como lanchas de asalto, vehículos anfibios, equipos de radio y control, antiaéreos etc…todo ello explicado por personal de la base.
La excursión tocaba a su fin, y nos desplazamos al comedor de tropa para degustar el almuerzo. Los chicos y chicas comieron igual que los marineros, unas papas con choco, filetes de lomo con verdura y tarta, y los que quisieron, ensalada…todo ello, rodeados de soldados y algunos oficiales. Los profesores estuvimos acompañados por los oficiales que estuvieron con nosotros todo el día. Al finalizar, nos acompañaron hasta los autocares y nos despidieron tan amablemente como se han comportado a lo largo de toda la visita. La vuelta en autobús fue tranquila, y llegamos a casa en torno a las 21:15, cansados, pero contentos de que todo haya salido muy bien.
Para finalizar, queremos, el Centro en general y el profesorado que hemos ido en particular agradecer, en primer lugar, a todo el personal de la base naval de Rota y al Tercio de la Armada de San Fernando el exquisito trato recibido y muy especialmente al personal de la oficina de reclutamiento por su hospitalidad, simpatía y amabilidad, así como por su disposición ante cualquier inconveniente que haya podido surgir. En segundo lugar, a Paco y Ángel, los conductores, por su disposición para lo que hiciese falta. Gracias.